ALMAS QUE ME HABITAN UNOS DÍAS
xxxCuerpos de mujer, cuerpos como almas que me habitan unos días, como si ellas los hubiesen enviado a hacerme compañía, mientras se quedan quizá en su verdadero cuerpo actual, ya ceniciento o desnivelado, ángel sin alas. Lámpara de un alto cuerpo, oro o nieve, que ilumina unas semanas de mi presente con luz que no tuvo nunca cuando real e inmediata. A esa luz vive uno, escribe uno, luz baja de la mujer íntima, soledad populosa de nadas, cada una con su nombre,cuerpo que voy haciendo realísimo a fuerza de recordar cicatrices, llagas, lozanías, pétalos, ligeras arrugas de flor o deslumbrantes muslos de materia pura. Una mujer desnudísima y mía ha cruzado esta página y nadie la hemos visto, y no digo su nombre porque no vuelva la cabeza y no sea ella, como en los sueños.
Umbral, Francisco. Un ser de lejanías. Barcelona; Ed. Planeta, 2001.