LOS REGALOS DE LOS AMIGOS (VII)

 

Después de haberme perdido por una puñetera infección la visita que hizo Víctor Lemes a Murcia hace un par de semanas, la red de amigos comunes que se extiende a lo largo y ancho del país ha conseguido que llegue a mis manos su ‘Lo siento Freud‘, un disco en el que Víctor hace un despliegue de amor hacia el vocabulario castellano a base de juegos sobre juegos con las palabras.

Aquí tienen un artículo que publicaba Fernando Neira, hace casi cuatro años, sobre este cantautor canario.

 

En la primera escucha de urgencia que uno ha hecho del disco, el tema que le da título pide que se escuche varias veces. Aquí la tienen:

 

 

LO SIENTO FREUD

Ni por asomo
Me niego a ser prudente y caminar con pies de plomo
Me niego a preguntarme dónde, cuándo, quién y cómo
Propongo el Anticristo, el superhombre, el Ecce Homo
Propongo no fingir la mierda que somos, ¿qué somos?
Caprichos esparcidos sin permiso a la deriva
Aleatorias armas de contradicción masiva
Secuelas proyectadas de forma consecutiva
Al grito urgente de sálvese quien viva
Pero aquel que se salve que no se quede conmigo
Si congela su júbilo no quiero ser testigo
Quedarse inmóvil es su crimen y su castigo
Cien años de soledad mirándose el ombligo
Mirándose el ombligo hasta llegar al estrabismo
Oliendo sus miserias condenado al ostracismo
Por aquellos que arriesgaron y saltaron al abismo
Por aquellos que intentaron suprimir el egoísmo
El egoísmo intrínseco, el innato, el immanente,
El que ejercíamos sobre nosotros mutuamente
Qué duro es el presente si ya no estás tú presente
Y el olvido pasa lista: Nostalgia ¡Presente!
Melancolía, temática explotada por la música hoy en día
Recurso fácil para conseguir la idolatría
Pero también es cierto que existe dicotomía
Que hay gente que se siente vacía y son mayoría
Son mayoría absoluta los que no se sienten llenos
Son mayoría y no los representan en el pleno
Son mayoría y no consiguen ser ajenos
A la insoportable levedad de echar a alguien de menos
Menos dolor y más intentos de enterrar la pena
Que no hay mayor condena que asumir una condena
Que sí, que lo más fácil es cortar las venas
Lo sabemos, pero merecemos una enhorabuena
Enhorabuena por seguir con vida aunque nos mate
Enhorabuena por la resistencia a los embates
Por no tirar el rey aunque sea obvio el jaque mate
Siempre hay alguien que también necesita nuestro rescate
Rescate recíproco y sucesivamente
Parece que la mierda así no es tan mal oliente
Pero qué duro es el presente si ya no estás tú presente
Y el olvido pasa lista. Nostalgia ¡Presente!
Por otro lado, no está tan mal esto de componer con pareados
Más fácil, más rápido decir lo que has pensado
Para que el receptor lo tenga menos complicado
Aunque confieso que a veces soy algo anarquista
Lo siento, me pone quebrantar lo estipulado
Y ahora volveré a rimar la palabra imprevista
Que siempre me gustó ser un poquito vanguardista
«Qué bromista el artista» dirán muchos puristas
Puristas a los que obviamente ignoro
Que no hacen otra cosa que estorbar en el aforo
Y aunque desprendo mi autocrítica por cada poro
No todo lo que reluce es indoloro
Dolor que vuelve y me revuelve si lo nombro
Es como echarle a Sísifo más piedras sobre el hombro
El ser humano sigue sin sacarme del asombro
Qué absurdo es remover la vida de entre los escombros
Escombros que resurgen de repente
Rememorando todo lo que alguna vez fue urgente
Qué duro es el presente si no estás tú presente
Y el olvido pasa lista. Nostalgia ¡Presente!

Futuro, presente, pasado,
Pretérito perfecto simple y complicado
Condicional condicionado mal conjugado
Busco donde agarrarme y me sujeto a tu predicado
Soy la primera persona de tu plural
Soy tu complemento circunstancial de tiempo, demasiado tiempo
Modo paliativo terminal
Basta por hoy. Voy terminando este experimento a lo James Joyce
Fluir de la consciencia para investigar quién soy
Hay quien lo llama rapear, yo ya me voy
Ya me autopsicoanalicé. Lo siento Freud