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JAVIER MARÍN CEBALLOS
EL PAISAJE DURANTE LA BATALLA
Dos cuerpos no pueden ocupar el mismo espacio
aunque puedan fundirse en un mismo pensamiento
o formar parte del mismo paisaje…
De donde se desprende
que un paisaje es tan amplio como la mente que lo ocupa
o que está lleno de vacíos tan vastos
que cada presencia es una hecatombe.
INCLEMENCIAS DE TIEMPO
Por fin llueve en la ciudad.
El olvidado ozono incita al lento desorden,
a la conjunción de planetas desorbitados,
a la búsqueda de nuevas rutas que conduzcan,
irremediablemente,
al portal de tu casa.
EL TEXTO QUE CONTENÍA TODAS SUS INTERPRETACIONES
Aprendió de memoria los textos de Confucio y de Aristóteles.
Luego dio un nombre a cada una de las plantas de bambú
y a cada uno de los árboles
y a cada uno de los bosques.
Luego resumió todos los nombres en uno
al que dedicó años de esfuerzo en olvidar.
Utilizó el resto de su vida en escribir una página en blanco
que condensara todo lo que ignoraba.
Murió en paz, rodeado del silencio de sus seres queridos.
EINSTEIN Y MARGARITA KONIÓNKOVA DE OPERACIONES ESPECIALES DEBAJO DE LAS SÁBANAS
Margarita Koniónkova
espiaba para la KGB
cómo, debajo de las sábanas de Albert Einstein,
la teoría de la relatividad
convierte los cuerpos desnudos
en haces de luz
que atraviesan la noche como un bombardeo de partículas alba.
En su informe al servicio secreto,
la Koniónkova escribió en tinta invisible:
…estas fueron las últimas palabras que Albert me dijo:
«me ahoga la carencia insoportable de tu lengua
cuando dejas de besarme para respirar».
CARTOGRAFÍA DE LA AUSENCIA
Cuando tú no estás el plano de la ciudad es un laberinto
indescifrable
Cuando vuelves es como un camino para bajar hasta el río
desde una casita dibujada por un niño.
Marín Ceballos, Javier. Javier Marín Ceballos. Murcia; Archivo general, 2008.
BUFES, VIDA MÍA
TELEGRAMA CON MOTIVO DE LA BODA DE UN VIEJO AMOR
Señora,
xxxxxxxefectivamente, hasta en las bodas más vigiladas
aparece siempre un desconocido sin corbata
con una lágrima en el ojal.
Deseo que seas locamente amada.
LETRA PARA UN BLUES NIUBUEY.
Mi pequeña sonríe como un ángel,
mi pequeña se mueve como Sarah Miles,
mi pequeña es dulce, coqueta, de caderas perversas,
sus pechos son como saquitos de leche.
Mi pequeña me besa con un poco de saliva,
y desliza sus labios sobre la piel como un gusano de seda.
Me entusiasman sus piececitos, pequeños como pirañas
y cómo se tumba en la cama y me pide por favor que me la coma.
MI ESPOSA LANCELOT (resumen de lo conocido)
Entonces no había verbos, ni caminos, ni árboles,
ni una naturaleza definida,
ni se discriminaba entre lo comestible y lo no comestible,
no habían límites, ni habían fundamentos,
ni animales, ni ciudades, ni promesas, ni costumbres,
ni sistema métrico,
ni existía diferencia entre lo que es sólido, líquido o gaseoso,
ni entre el objeto y el sujeto,
y las cosas no tenían nombre,
o bien a los nombres no les correspondían inequívocamente las cosas.
Encima de este entonces estaba Lancelot, pálida como una nube.
LA VIDA DE LAS ABEJAS
Ella robaba azucarillos en las cafeterías xxx y salía radiante
poniéndose el azúcar en la lengua
para que yo acudiera a besarla
(como un búfalo en extinción acude al olor de la hierba)
PARTE DE GUERRA
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxAl Haro
En los últimos años hemos aprendido sin esfuerzo
que no debemos enfrentarnos con los hechos a campo abierto.
Con el fin de adoptar una estrategia más acorde con nuestras facultades,
hemos creado un código general de signos ininteligibles incluso para nosotros.
Así van las cosas.
Marín Ceballos, Javier. Bufes, vida mía. Murcia; Editora Regional de Murcia, 1986.
CHAPAS POÉTICAS
Cristina Morano tuvo hace unos meses, con motivo del cumpleaños de un amigo, la idea de hacer unas chapas con versos de poetas murcianos (o residentes en la región). Casi agotada la primera tirada está a punto de sacar la segunda, pero mientras aquí tienen las chapas de esa primera edición para llevar versos en la solapa, una colección en la que aparecen versos de Manuel Susarte, Katy Parra, Ángel Manuel Gómez Espada, José Alcaraz, Violeta Nicolás, José Antonio Martínez Muñoz, Antonio Marín Albalate, Sebastián Mondéjar, Vicente Cervera Salinas, Beatriz Miralles, José Luis Martínez Valero, Carmen Piqueras, Javier Moreno, José Daniel Espejo, Andrés García Cerdán, Javier Marín Ceballos, Antonio Durá, Antonio Jesús Gras Mentado, Amada García Puentes, Manuel Pujante, José Óscar López, Diego Sánchez Aguilar, Juan de Dios García, David López Sandoval y un servidor.
JOSÉ MARÍA ÁLVAREZ EN EL MUSEO ‘RAMÓN GAYA’
Este año, con motivo de la celebración del Día mundial de la Poesía, el Museo Ramón Gaya editó una pequeña pero cuidadísima edición de poemas de José María Álvarez, poeta homenajeado esta vez por el Museo.
Un servidor participó en dicho homenaje porque uno asiste a todo lo que puede de lo que organiza el Museo, y quedó inmortalizado en una fotografía en la que José María Álvarez leería después de mí.
De esa edición dejo hoy un poema políticamente incorrecto en estos estúpidos y absurdos tiempos que corren.
ELOGIO DEL TABACO
xxxxx«Digamos inmediatamente que desconocemos la naturaleza
xxxxxexacta de la experiencia crucial»
xxxxxxxxxxMIRCEA ELIADE
xxxxx«Poder fumar es una bendición –dijo aspirando el humo
xxxxxcon delectación»
xxxxxxxxxxHERBERT GEORGE WELLS
xxxxx«Extraordinario placer»
xxxxxxxxxxWILLIAM SHAKESPEARE
Pocos placeres bajo los cielos misteriosos
más elevados y serenos
que tú, tabaco. Siempre
aumentando la dicha, en la fortuna,
o consolando el infortunio,
con la misma elegancia
con que silenciosamente envuelves
el sueño de la lectura o de la música,
los secretos ritmos de la meditación
o el agradable conversar.
Tantos momentos perdurables van unidos
a ti, tantas horas
que tú acompañas o mejoras.
Enigma portentoso
del humo, al que nos entregamos
como a la sabiduría o a la suerte
que tampoco nunca entenderemos.
Noble compañero de la inteligencia,
de la alegría de vivir, del
amor, y de ese otro
favor, el vino
que alegra el corazón y la mirada.
Nunca nos faltes.